Técnica: Uso de pequeñas incisiones, cámaras (endoscopios) y herramientas especializadas para acceder a la columna. Beneficios: Menor dolor postoperatorio, recuperación más rápida, menor riesgo de infecciones, cicatrices mínimas.
Técnica: Se utiliza un endoscopio para tratar hernias de disco y compresiones nerviosas. Beneficios: Alta precisión en la remoción del tejido afectado, procedimiento ambulatorio en muchos casos, recuperación más corta en comparación con la cirugía abierta.
Técnica: Uso de energía láser para reducir la presión de hernias discales. Beneficios: Técnica no invasiva. Tiempo de recuperación muy breve. Ideal para pacientes con hernias pequeñas o moderadas.
Técnica: Uso de sistemas de imágenes en tiempo real para colocar implantes con precisión. Beneficios: Mayor seguridad en procedimientos complejos. Menor riesgo de errores en la colocación de tornillos o placas. Mejora la estabilidad de la columna.
Técnica: Implantación de discos artificiales en lugar de realizar una fusión espinal. Beneficios: Mantiene la movilidad natural de la columna. Menor desgaste en segmentos adyacentes. Indicada para pacientes jóvenes y activos.
Técnica: Implantación de dispositivos que envían impulsos eléctricos para bloquear señales de dolor crónico. Beneficios: Alternativa no farmacológica para el manejo del dolor. Reversible y ajustable según las necesidades del paciente. Mejora la calidad de vida en pacientes con dolor intratable.
Técnica: Uso de robots para planificar y realizar procedimientos con alta precisión. Beneficios: Mayor precisión en la colocación de implantes. Menor tiempo quirúrgico. Reducción en complicaciones y tiempo de recuperación.
Técnica: Uso de células madre o factores de crecimiento para regenerar tejidos dañados. Beneficios: Enfoque regenerativo en lugar de quirúrgico. Puede retrasar o evitar cirugías en casos de degeneración discal temprana. Mejora en el dolor y la funcionalidad.